Estamos a punto de entrar en el mes de julio. En abril de 2010 sabíamos ya quién iba a ser la comisaria del pabellón de España en la 54 Bienal de Venecia, Katya García-Antón. ¿Se están haciendo planes para la siguiente edición, que se inaugurará en junio de 2013? Que sepamos, no, y queda menos de un año. La decisión corresponde a la AECID (Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo) y, en concreto, a su Directora General de Relaciones Culturales y Científicas, Itziar Taboada, una diplomática con suficiente experiencia y un considerable historial de cargos de responsabilidad que, no obstante y a juzgar por su curriculum, no debe tener el criterio artístico necesario. Recordemos que en 2010 su antecesor en el cargo, Carlos Alberdi, convocó un comité asesor integrado por Carmen Giménez (conservadora del Guggenheim Museum, Nueva York), Estrella de Diego (catedrática en Arte Contemporáneo, Universidad Complutense de Madrid), Bartomeu Marí (director del MACBA) y José Lebrero (director del Museo Picasso de Málaga), que escogió a García-Antón como comisaria. Unos meses más tarde, en septiembre –y ya íbamos mal de tiempo- ella anunció que la artista que representaría a España en la bienal sería Dora García.

La organización de la Bienal de Venecia debería ser, en mi opinión -y la de muchos-, competencia del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes. La Bienal no constituye un ejercicio de cooperación al desarrollo sino de promoción internacional de nuestras artes plásticas. Y para eso hay un departamento en el citado Ministerio. Otra opción sería que AC/E (Acción Cultural Española) asumiera esa tarea, al igual que gestiona la participación española en las Exposiciones Internacionales. Pero como el embrollo institucional de la internacionalización de la cultura sigue exactamente igual que estaba, con el Instituto Cervantes, AC/E, Exteriores, Cultura y AECID pisándose funciones… si no hay noticias inmediatas en otro sentido le tocará a la Sra. Taboada lidiar con lo de Venecia. Ojalá tome como ejemplo el sistema implantado por el Instituto Ramon Llull que ya para la 54 Bienal convocó un concurso con el fin de elegir el proyecto que representaría a Cataluña y las Islas Baleares. Este año lo ha vuelto a hacer, y la convocatoria se cerró hace unos días, el 22 de junio. Sólo si la AECID publicara enseguida las bases daría tiempo para elegir comisario o proyecto –mejor esta segunda opción- mediante concurso; si no, habría que constituir un comité asesor. Nada de designaciones a capricho de ministros, directores generales o mandamases en general, por favor.

Y pronto. Que la mayoría de los países con pabellón en los Giardini ya han anunciado quienes serán los artistas que los representen o, al menos, están en ello: han nombrado comisarios o han convocado concursos. Les pongo al día de cómo va la gestación de la prometedora 55 Bienal, cuyo comisario general será Massimiliano Gioni, director de exposiciones en el New Museum de Nueva York. Pongo enlaces a las respectivas noticias, que a veces incluyen detalles sobre el proceso de selección.