Este jueves se inaugurará la FIAC, feria de arte contemporáneo de París. Como toda feria que se precie, tiene un glamuroso programa VIP, dirigido fundamentalmente a coleccionistas, directores de museos y comisarios de renombre pero también a autoridades culturales y políticas. Tan exclusiva es la atención que estos VIP reciben que sólo mediante contraseña puede accederse al área a ellos dedicada en la web de la feria. La he solicitado, para curiosear, pero nadie me ha contestado. Sí conocemos una de las actividades que se desarrollarán en París, porque se ha anunciado en el newsletter de Art-Agenda: Laurence Dreyfus Art Consulting ha organizado una exposición en el Hotel Shangri-La (700 euros la noche), que bajo el título de Lines & Figures: Conversations reunirá durante unos días, del 19 al 23 de octubre y sólo visitable mediante cita previa, obras de cotizados artistas asiáticos –en su mayoría, chinos; de ahí la elección del hotel- y europeos: Charlotte Cornaton, Eko Nugroho, Huang Zhiyang, Liu Yue, Monique Frydman, Olafur Eliasson, So Young Choi, Wang Jianwei, Wang Keping, Yan Pei Ming, Yong Yongliang, Yu Hong, Zao Wou Ki, Zhan Wang, Zhang Huan “y sorpresas”. Laurence Dreyfus es una comisaria independiente que fue galerista y actúa como marchante y asesora para particulares y empresas, y como shadow advisor –asesor en la sombra, dice ella misma- para colecciones públicas. Que está muy bien relacionada, vaya. Los espacios de exposición privados no son tan raros en el ámbito del mercado del arte: las galerías más potentes tienen sus show rooms al resguardo del público, y las grandes casas de subastas montan también pequeñas muestras de sus “obras estrella” para visitas particulares; incluso las llevan en avión a los confines más lejanos para que los potenciales compradores puedan verlas. Los museos públicos más grandes hacen dos –o tres- inauguraciones de sus exposiciones, una de ellas reservada a los VIP, que en este caso no son los coleccionistas sino los patrocinadores y las autoridades políticas. Se hacen también visitas privadas, generalmente –pero no siempre- previo pago.
El mismo jueves 20 se inaugura en Madrid Estampa, feria de arte múltiple que abre una prometedora nueva etapa con esta edición, dirigida por Chema de Francisco. Su programa VIP no tiene nada que ver con el de París o con el de Frieze, en Londres, que es igual de exclusivo. No es sólo que se trate de una feria de mucho menor presupuesto y dirigida a coleccionistas que pueden no tener el elevado poder adquisitivo de los invitados de Laurence Dreyfus. Es es que maneja un concepto diferente de la “gente muy importante”. Está limitado a dos líneas de asesoría, para coleccionistas –encargado a Sara M. Pratt, Artshopper- y para “intermediarios” –de la mano de Elisa Hernando, ArteGlobal- está dirigido a orientar a los nuevos coleccionistas y a fomentar los contactos entre expositores y compradores de cualquier nivel.
La actual situación económica convierte al VIP de la primera clase en algo casi obsceno. El privilegio, la ostentación y el lujo desenfrenado deberían ser evitados en estos días. Es una pena que sea ésta la imagen del coleccionista que predomina en el imaginario colectivo, gracias en gran parte a los medios de comunicación, que se hacen eco de las extravagancias de unos pocos. La realidad es que la inmensa mayoría de los coleccionistas no forman parte del mundo del “gran capital”; hay, claro, empresarios con cuentas rebosantes, pero también otros con presupuestos más modestos y, sobre todo, muchos profesionales liberales: arquitectos, abogados, médicos –abundan los dentistas-, diseñadores… también algunos cantantes y futbolistas. Esta sería la “gente muy importante” para el arte, especialmente cuando entiende que se trata no sólo de comprar objetos para decorar sus casas y despachos sino también de apoyar la subsistencia de un sector cultural que está produciendo hoy el patrimonio artístico de mañana.
Aún así, hagamos un llamamiento: que se deje ya de lado el odioso acrónimo. Empezando por la VIP Art Fair, la feria de arte online, que ya ha anunciado su próxima edición. Los artistas, los galeristas, los docentes y el público somos también muy importantes.